Un Limes Geronticus y la Threskiornithidae avenue

Hace escasos días, una importante noticia sobre una observación al otro lado del Estrecho, nos entusiasmó a muchos.... "11 Ibis Eremitas han cruzado el Estrecho. Han entrado por Cabo Marshan" (Yeray Seminario). Y siendo tan singular, no nos sorprendió. De hecho, en la campaña de 2012 redactamos un post que por una serie de cuestiones decidimos dejar en conserva. Hoy, los damos a conocer por lo que de augurio contenía:

Cuando en la campaña 2012 comenzamos la serie de posts titulados “Spoonbill & Company”, una de las primeras atenciones fue dedicada a la inmediata vecindad de una zona querenciosa para los Ibis Eremitas en la playa de La Barrosa. Justo al lado del corredor migratorio que estudiamos. Y fantaseábamos con la posibilidad de que pese a que se supone que la población occidental de estas aves no migra, al ser de la misma familia de moritos y espátulas, y al tener esta la capacidad de conformar “bandos mixtos”, cualquier día veríamos algo que nos sugeriría lo contrario.

Pues bien, no hemos visto un bando mixto conformado por estas aves. Pero hace más de una semana, los observadores en Torre del Puerco, ya acostumbrados a los ciclados rutinarios a gran altura de una decena de Ibis sobre el hotel a pie de playa “Barceló Sancti-Petri”, pudimos ver por primera vez como esas aves lo hacían sobre la orilla del mar. Nos llamó mucho la atención, pero supusimos que era el viento de levante quien las desplazaba hacia el oeste.

El siguiente sábado fue diferente. Observamos ya pasado el mediodía, como un bando de 7 aves volaba desde el NO en sentido SO. Ya frente a la Torre del Puerco, las aves comenzaron a ciclar alcanzando gran altura, para finalmente desaparecer sobre el mar dirección O.

Hemos sopesado si es una vía de conexión con sus querencias en la Sierra del Retín (entre Vejer y Barbate). Es posible, pero tras casi dos años de permanente estancia en las atalayas de censo en el proyecto Limes, nunca antes hemos observado esta derrota de vuelo en los Ibis. Y tampoco es el camino habitual para ello. Sabemos bien que esta conexión con sus dormideros del Retín, transcurre habitualmente por la parte más oriental de los Pinares de Roche. 

En cualquier caso, y bajo criterios estrictamente conservacionistas, las expectativas de una conexión migratoria de la población gaditana de Ibis con la marroquí es fascinante. No olvidamos que casi todas las aves provenientes de los contingentes en cautividad de núcleos zoológicos europeos, y por ende del núcleo gaditano, tienen su origen en el Atlas Medio. Y por análisis del ADN mitocondrial, sabemos que son muy diferentes genéticamente de las colonias del atlántico marroquí.

La posibilidad de un “intercambio” entre las dos poblaciones es todo un anhelo que magnificaría el proceso de reintroducción. Y en el Proyecto Limes Platalea estaremos bien atentos en nuestra privilegiada “Threskiornithidae avenue”.